Torre de Loreto (Espartinas)
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La torre de Loreto, también concocida como torre mocha y en en sus orígenes como turris lauretana, se encuentra en el camino de Loreto del municipio de Espartinas.
Contenido
Historia
La torre defensiva es medieval, de origen cristiano. La explotación agrícola durante la época islámica en lo que fuera llamado «alquería de Lorit», posteriormente sería donada en el repartimiento de Sevilla a Mincer Enrique. En este momento arranca la primera fase constructiva de lo conservado en la actualidad en el santuario de Loreto con el levantamiento de la torre defensiva de estilo mudéjar.
Aunque no existen datos que puedan precisar su proceso constructivo, se levantó en los años siguientes a la toma de Sevilla por el rey Fernando III «el Santo», en 1248.
Su construcción tan tardía se explica porque el poniente del Aljarafe no se reconquistaría hasta 1252 y formaba parte del sistema defensivo de la comarca para prevenir las incursiones musulmanas desde el oeste; pero también, a partir de ese momento, al desparecer dicho peligro, careció de utilidad como torre militar de vigía.
Conforme a la leyenda, cuando en el Sábado Santo de 1384 se encontró la imagen de Nuestra Señora del Loreto, patrona de Espartinas y del Aljarafe sevillano, así como de la Aviación, fue llevada a la iglesia parroquial de Umbrete pero, según dicha tradición, volvió milagrosamente al lugar en el que fuera encontrada, en el cual existe todavía un crucero, y que se sitúa cercano a la torre, por lo que se lleva la Virgen al interior de ésta, por ello sirvió la torre como su primera y provisional ermita, en la que permaneció para recibir la devoción de los fieles hasta que se construye la primitiva ermita de la Virgen de Valverde en el mismo siglo XIV, ya que en un principio recibió la advocación de Santa María de Valverde, siendo utilizados ambos nombres indistintamente para la misma imagen, viniendo el de Loreto por la inscripción de «Turris Lauretana» que exsitió en la torre.
Cuando se crea el conjunto monástico a partir de la hacienda, en el siglo XVI, pasaría a formar parte de su recinto conventual, en el que se inegra excepto unos pocos años por la exclaustración del siglo XIX. En 1755 sufrió daños a consecuencia del terremoto de Lisboa, que serían posteriormente restaurados. Perteneciente a dicho recinto del convento franciscano, se viene usando su cuerpo inferior como almacén por los frailes.
El 22 de abril de 1949 es declarada bien de interés cultural por el Decreto de protección de castillos, a su vez en 2007 como parte integrante del conjunto formado por la hacienda y el santuario de Loreto en la categoría de monumentos.
Torre
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El convento y la hacienda de Nuestra Señora de Loreto se encuentran adosados formando un conjunto de edificaciones en cuya confluencia se levanta la torre defensiva o torre mocha, denominada «torre de Loreto».
La torre mocha, de estilo mudéjar, fue levantada sobre la alquería árabe, es de planta cuadrada y tiene dos alturas. Presenta lados de 8 metros, cuyos lienzos se disponen conforme a los cuatro puntos cardinales, estando situado su acceso en el muro del lado este, puerta que se ubica elevada sobre el suelo, lateral en el que se presenta el único pequeño vano ojival de sus gruesos muros.
Alcanzando la torre una altura de 15 m, presenta cuatro plantas, sirviendo la cuarta de azotea; de las cámaras de las que dispone, dos se cubren con bóvedas rebajadas y la intermedia cuenta con bóveda de crucería (descartando un posible origen árabe).
La fábrica de todo el edificio es de mampostería y en ladrillo, asimismo los peldaños de la escalera interior. Presenta sillería esquinera de granito, pero dado el pequeño tamaño de sus sillares estos deben haber sido reutilizados de otra construcción cercana, careciendo de marcas de cantería. En las empinadas escaleras laterales que suben a la cámara superior hay bóvedas de medio punto, también con fabrica de ladrillo. Una aspillera le da luz al interior de ella.
Aunque desmochada, el parapeto de la torre ha sido reconstruido durante un proceso de restauración aplicado. Así mismo en la fachada se pueden apreciar parches de diversos tipos de ladrillos empleados para la reparación de los paramentos, y también restos de revoco de cal.
Desde la torre vigía se podían divisar las localidades de Espartinas, Sanlúcar la Mayor, Umbrete y Villanueva del Ariscal.
Su estado de conservación es bueno; se puede ver la torre desde el exterior del recinto conventual e incluso acercarse a ella por un patio desde el interior de la hacienda, si bien es preciso pedir permiso a los frailes para visitarla.
Bibliografía
- El contenido de este artículo incorpora material de la declaración del Bien de Interés Cultural publicado en el BOJA Nº 235 el 29 de noviembre de 2007 (texto), que se encuentra en el dominio público de conformidad a lo dispuesto en el artículo 13 de la Ley de Propiedad Intelectual española.
- Patrimonio Arquitectónico. Hacienda y Convento del Loreto, Francisco Amores. Ayuntamiento de Espartinas, 2013.
- Torre de Loreto. MonumentalNet.
Mapa de situación
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