Hermanas Antúnez
Las Hermanas Antúnez, Josefa y Ana, fueron dos célebres bordadoras de la Semana Santa sevillana, que mantuvieron una interesante actividad artística en este género durante el último tercio de siglo XIX.
Su labor estuvo centralizado en su taller, situado en el Barrio de La Macarena, en la antigua Huerta del Zapote, cerca de la actual calle calle Froilán de la Serna. Allí materializaron con su trabajo los bocetos de los mejores diseñadores de la Semana Santa hispalense del momento, como Manuel Beltrán Jiménez o Guillermo Muñiz.
Sus bordados se reconocen por sus opulentos adornos y el abultado de relleno de grandes masas, con piezas de especial valía, entre las que se pueden citar el manto de Virgen del Mayor Dolor y Traspaso que data de 1872; el conjunto de manto y palio de la Hermandad de la Carretería de 1886; o la magnífica túnica "de cardos" de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder bordada en 1881.
Precisamente el primer trabajo concertado por las Hermanas Antúnez con la Hermandad del Gran Poder fue el citado manto de la Virgen del Mayor Dolor de 1872, estrenado en la Semana Santa del año siguiente, adquirido luego por la Hermandad de La Estrella en 1908 para su imagen titular. Es esta una obra suntuosa y espectacular, que presenta un bordado regular y simétrico con tallos vegetales, hojarasca y cardos más pesados en el perímetro y otros más diminutos en el centro, donde abundan las flores de pasión, lirios, azucenas y rosas, al estilo de las ricas policromías de las tallas barrocas. Este manto ha sido lucido sin interrupción por la Virgen de la Estrella hasta los años sesenta del siglo XX; posteriormente ha sido restaurado y sus bordados pasados a nueo tejido en 1992 en el Taller de Fernández y Enríquez.
Algunos años más tarde, en 1881, realizan para la misma Hermandad del Gran Poder la célebre túnica morada bordada en oro a realce sobre terciopelo morado conocida como la de "los cardos", estrenada el 15 de abril de eses mismo año.
Para la popular Hermandad de Nuestra Señora de la O, Josefa y Ana Antúnez bordaron en 1880 un manto en oro a realce sobre terciopelo negro según diseño de Manuel Beltrán Jiménez, estrenado en ese mismo año y hoy desaparecido. Sí se conserva, no obstante, el valioso palio bordado por ellas al año siguiente a juego con el manto, con dibujos del mismo Manuel Beltrán. Este palio fue vendido a la Hermandad del Santo Entierro de Jerez de la frontera en 1930, y más tarde pasado a nuevo tejido en el Taller de Carrasquilla.
La Hermandad de la O de Sevilla volvió a encargar un nuevo manto a las mismas bordadoras, de líneas barrocas sobre terciopelo negro, estrenado en 1891. Con diseño también de Manuel Beltrán y grandes hojas de acanto que se hace más menudo según se desarrolla en altura, este palio también fue adquirido por la Hermandad del Santo Entierro de Jerez de la Frontera en 1930.
Para la Hermandad de la Expiración de Triana realizaron las Hermanas Antúnez un espléndido manto en oro de realce para la Virgen del Patrocinio, que luego pasó a una cofradía de Huelva.
En 1892 bordaron el palio procesional de la misma Virgen del Patrocinio en oro y sedas sobre terciopelo negro, adornado con elementos vegetales, roleos, tirabuzones y ramilletes de flores, con fina crestería superior de movidas puntas; un elegante palio que en 1922 pasó a ser propiedad de la Hermandad de la Santa Veracruz y Santo Entierro de Utrera.
En 1886 procesiona por vez primera bajo palio Nuestra Señora del Mayor Dolor de la Hermandad de la Carretería. Sus caídas se bordaron, al igual que el manto, con hilos de oro en realce sobre terciopelo negro, con amplias y asimétricas hojas de acanto. Las caídas y el techo del palio fueron adquiridos por la Hermandad de Jesús Despojado desapareciendo el manto en un incendio fortuito en 1955. Cuatro años más tarde se estrenó el manto actual, según dibujo de Julio Laguna basado en el modelo anterior. Los bordados se realizaron en el sevillano convento de Santa Isabel sobre terciopelo azul marino.
Un posterior manto azul de terterciopelo bordado en oro a realce realizaron para la Virgen de la Presentación, de la Hermandad de El Calvario con diseño de Guillermo Muñiz, estrenado en 1902 y hoy desaparecido.
Bibliografía
- Antonio Mañes Manaute: Esplendor y simbolismo en los bordados. En: Sevilla Penitente, Volumen III. Editorial Gever, S.A., Sevilla, 1995.
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