Grutesco
Se denomina grutesco a un tipo de decoración, escultórica o pictórica, en la que se mezclan motivos vegetales con figuras humanas y mitológicas de pequeño tamaño (lo cual lo diferencia de otras decoraciones similares, como los arabescos).
El nombre de grutesco parece ser que proviene de de la decoración descubierta en los últimos años del siglo XV en Roma, en algunas de las dependencias de las Termas de Tito, llamadas por entonces grutas.
Característicos de la época renacentista, Rafael se inspiró en aquellas decoraciones "grutescas" para la ornamentación de las estancias del Vaticano, y éstas a su vez sirvieron como modelo para arquitectos, ceramistas, carpinteros o pintores posteriores.
Los grutescos abundan en la decoración escultórica de la arquitectura renacentista, en especial en su primera fase, conocida como plateresco; y así pueden verse en especial en elementos lineales como frisos y fustes de pilastras de los paramentos de esa época.
En Sevilla pueden verse espléndidos ejemplos de grutescos en la fachada del Ayuntamiento de Sevilla que da su frente a la Plaza de San Francisco. En la provincia pueden verse igualmente en portadas de iglesias como la de Santa María de Mesa de Utrera o en la Colegiata de Nuestra Señora de la Asunción de Osuna.
Algunos siglos más tarde la arquitectura historicista retomó las decoraciones con grutescos para las obras neorenacentistas, tal como pueden verse en tantos edificios creados en ese momento, de entre los que puede destacarse la actual sede del Museo Arqueológico provincial de Sevilla ubicado en la Plaza de América.
Bibliografía
- Glosario de la Historia del Arte, de la Editorial Salvat, S.L. para Diario El País, año 2005.
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