Carnaval de Aguadulce
Carnaval de Aguadulce.
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En la actualidad en el mes de febrero, sobre mediados, se celebra en Aguadulce el carnaval.
Todos, niños, jóvenes y mayores, se disfrazan sobre las seis de la tarde para realizar un pasacalles por todas las calles del pueblo
Al anochecer pasan a celebrarlo a la caseta municipal, donde se entregan los premios al mejor disfraz, tanto individual como en grupos. Estos últimos años se han ido formando grupos de chirigotas a los que también se les dan premios.
Los carnavales en Aguadulce han existido toda la vida desde mucho tiempo. Yo me acuerdo que cuando tenía 7 u 8 años me contaba mi abuela muchas historias, entre ellas me decía que en sus tiempo también había carnavales, se hacían sus propios disfraces con pocas cosas porque no había, pero mi abuela me contaba que usaban máscaras, sacaban sus coplas y jugaban a los juegos típicos de entonces.
Después un poco más tarde ya eran mis hermanas, que también existían los carnavales, jugaban al cachucho que era los botijos o búcaros que se estropeaban se guardaban para ese día.
También había estudiantina con unas coplas que se le sacaban a los mismos vecino nunca se mencionaba los nombres a quien iban dirigidas, bueno seguro que habían muchas cosas más.
Ahora en los últimos años cada día va en auge, cada año se viste más gente con disfraces más bonitos y originales.
El carnaval de antes con el de ahora no se puede comparar porque no había dinero ni disfraz, no se podía comparar.
Se vestían con unas enaguas de su madre o como podía, o de su abuela, y una careta de cartón, para que no lo conocieran y un sacudidor con una caña muy larga y decía: «¡qué no me conoce!, ¡qué no me conoce!».
Después de la guerra quitaron las caretas pero se vestían, con ropa vieja porque era lo que había.
Mucho papelillo que las mocitas hacían serpentina, que los mozos a las mozas envolvían. Así disfrutaban.
Más tarde se formó una murga de hombres y mujeres las coplas la sacaban con las cosas que le pasaban a las mozas con los mozos en el pueblo. Las cantaban en tiendas, tabernas, y en un platillo le echaban dineros, por eso cantaban.
El carnaval mucho se disfrutaba, los mozos con las mozas, jugaban todos, los cántaros y búcaros ellos buscaban, en la plaza a las dos de la tarde empezaban, y en la calle chica también; los rompían.
Y a la rueda, jugaban en la carretera porque muy poco coches pasaban. Mejor que ahora porque eran tres días. Los que los chicos con las chicas se juntaban y la mano le daban. A la rueda las sacaban y una soga saltaban, más tarde a pasear, a la carretera, hasta la cantarilla grande llegábamos, era la feria de las mujeres, no había caseta ni jurados, pero el chico que una chica le gustaba le daba la mano y se hacían novios y se cantaban.
“Ya está aquí la feria de las mujeres, la que no le salga novio que aguarde al año que viene”.
En la rueda el mozo a la moza que le gustaba le cantaba:
- A la luz del cigarro te vi la cara.
- No he visto clavellina más encarnada.
- Quiéreme niña hermosa que por ti muero
- mira que es mucho lo que te quiero , quiéreme.
La chica sabía que a él le gustaba y le cantaban:
- Sácalo niña a bailar, sácalo que es muy salao
- ya verás como se pone la gorrilla de lao
- pantalón a lo chanchullo sácalo niña a bailar
- aunque luego no sea tuyo.
Se disfrutaba más en la feria de las mujeres, se iba a sacar palmito todos juntos el domingo piñata.
El carnaval de mi infancia lo recuerdo por los juegos, pero más por la estudiantina y comparsa. Se hacian para sacar la comida para los hijos. Se sacaban coplas a todas las casas que destacaban en el pueblo.
Antonio "el Jareñito" era el maestro de la estudiantina. Las copals eran la mayoría muy picantes, pero respetando a las personas.
El carnaval de antes era mas bonito que el de ahora. En la plaza se jugaba mucho a la rueda y al cacharro, que son unos búcaros y saltábamos, bailabamos, jugábamos a la gallinita, a la piola, a la pelota y tambien cantábamos por las calles.
El carnaval se celebraba con muchos juegos. Nos divertíamos mucho. Ibamos de casa en casa pidiendo cántaros y búcaros y con ellos jugábamos al "cachucho". Era el nombre que tenía el juego. Nos lo tirábamos uno a otros y había que cogerlo con las manos. El que se le escapaba y se le caía perdía.
También jugábamos a la rueda. Se hacía una rueda y se plantaba una en medio de la rueda y contábamos. La que estaba en medio sacaba a otra y así íbamos dando la vuelta en la rueda. Disfrutábamos mucho.
Referencias
- ↑ Articulo sobre carnaval de Carmen Gloria.
- ↑ Articulo sobre carnaval de Gregoria Gragea Fernández.
- ↑ Articulo sobre carnaval de Ana Sánchez Parejo.
- ↑ Articulo sobre carnaval de Carmen Gordillo Rangel.
- ↑ Articulo sobre carnaval de Remedios Sánchez Fernández.
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