Calle Lineros (Sevilla)
La calle Lineros de Sevilla es una pequeña pero importante vía urbana que se encuentra situada en el corazón del viejo Casco Antiguo y tradicional de la ciudad.
Su trazado va desde la calle Lagar hasta la plaza de Jesús de la Pasión, ya en la trasera de la iglesia del Salvador.
En su corto recorrido solo una calle acomete a ella, la también pequeña y céntrica calle Córdoba, casi en uno de sus extremos y procedente de la siempre concurrida plaza del Salvador, mientras que por el extremo opuesto se continúa con la popular Calle Puente y Pellón (Sevilla)|calle Puente y Pellón, que la comunica con la renovada plaza de la Encarnación.
Tras las últimas reformas realizadas, hoy la calle Lineros presenta un carácter absolutamente peatonal, lo que la hace más atractiva y agradable a la hora de transitar por ella.
Se trata de una calle de corto recorrido, estrecha y de trazado algo irregular, que responde al habitual viario urbano heredado de la antigua Sevilla medieval. Configurada como una de las tradicionales calles comerciales del centro, presenta a ambos lados tiendas de pequeño o mediano tamaño, donde predominan las destinadas a ropa de moda junto con otras de zapatería, joyería, cafeterías, etc.
Sin muchos elementos que destacar, se hace mención aquí de un muy curioso punto decorativo existente en la esquina con la citada calle Lagar: la presencia de un enorme caracol que aparece como trepando por las paredes, un objeto colorista y de una gran originalidad, aunque si no se sabe de su existencia bien puede pasar desapercibido.
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