Paseo de Carlos de Mesa (Coria del Río)
El Paseo de Carlos de Mesa de Coria del Río se encuentra situado en el límite al este del casco urbano de esta localidad.
Es un paseo que se desarrolla en un amplio terreno cuya planta tiene forma rectangular alargada, con uno de sus lados de mayor longitud bañado por la margen derecha del río Guadalquivir, al que se adosa en paralelo en su recorrido.
Está limitado al norte por una explanada ocupada por kioscos, terrazas y cafeterías, más una zona con pequeños embarcaderos; al oeste por una zona abierta y libre de uso; al sur por el campo municipal de fútbol, y al este por el río Guadalquivir.
Su interior está urbanizado mediante distintos paseos longitudinales y paralelos que se encuentran separados por varias filas de arbolado y de setos, y cuenta con diferentes zonas destinadas y bares y juegos infantiles, entre otros.
El pavimento general del cuerpo principal del paseo está realizado a base de albero, un clásico material "blando" que se encuentra repartido por todas las bandas longitudinales que lo recorren de norte a sur.
No obstante, en la zona más próxima al río existe otro tipo de paseo más urbanizado y pavimentado con una solería dura a base de baldosas de terrazo. Es esta una banda longitudinal muy distinta del resto del paseo, que se encuentra delimitada directamente por el cauce del Guadalquivir mediante un murete bajo de contención; un paseo urbano muy agradable que sobrepasa los propios límites de la longitud del paseo Carlos de Mesa y que es frecuentado por decenas de paseantes que lo recorren a diario. Desde él, la vista directa del gran río es especialmente gratificante, paseando a la sombra de los altos árboles que lo bordean al otro lado.
Puntos de interés
Monumento a Hasekura Tsunenaga
Ubicado junto al río Guadalquivir, el monumento se emplaza al pie del río que trajo hasta aquí a este noble japonés, cristiano y embajador del señor del feudo de Bojú, Date Masemune.
La historia parte de 1613 cuando Hasekura zarpó del puerto japonés de Sendai en misión diplomática hacia España para establecer relaciones políticas y comerciales y solicitar apoyo para acrecentar el cristianismo en su país. En 1614 llegó a las costas de Sanlúcar de Barrameda, pero para entonces ya habían cambiado mucho las cosas en su Japón natal: la religión cristiana había sido prohibida.
Por ello cuando se emprende el viaje de vuelta a su país, un grupo de nipones samurais decidió quedarse definitivamente en España, en concreto en Coria del Río. Fruto de aquella expedición es, entre otras, la existencia y profusión del apellido "Japón" entre muchos de sus vecinos.
Mapa de situación
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