Historia de Benazuza

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Historia de Benazuza.

Alquería de Benazuza

Al-Ándalus

Durante la dominación musulmana, la zona del Aljarafe estaba sembrada de casas de campo para la labranza a las que los árabes llamaban “Alcarias” y que en la dominación cristiana se llamarían “Alquerías”. Benazuza era una de éstas.

La palabra Benazuza parece ser un derivado de Benisusa, que está formada por 1a unión de 1as palabras “Beni” y “Susa”. Beni significa montaña, cumbre, y la palabra Susa, o su masculino Suso, significa arriba. Por lo expuesto, se puede conje¬turar que a esta alquería se le pondría el nombre de Benazuza por quererla denominar dos veces eminente: eminente por su bondad y eminente por su situación, ya que, respecto al río Guadiamar, está situada a gran altura.

Villa de Sanlúcar

Verificadas las conquistas de Sevilla y el Aljarafe, empezó el repartimiento de las Villas, Aldeas y Alquerías. En el primer reparto hecho por el rey Alfonso en el año 1253 (Era de 1291) y que recoge D. Pablo Espinosa de los Monteros en su “Historia de Sevilla y su Tierra” (parte 2ª, libro 52), en lo referente a Sanlúcar dice:

"Así heredó el Rey a Sanlucar dióle 82.000 pies de olivar y de higueral que había en el cuerpo del término de la Villa; dióle Benizusa en que había 15.000 pies de olivar y higueral, y de tierra 504 aranzadas."



Permaneció formando parte de la Villa de Sanlúcar, desde 1253 a 1258, en cuyo año, el día 15 de febrero, Don Alonso da a Don Anaya una Alquería llamada Benazuza, en término de Sanlúcar, junto con tres yugadas de bueyes de heredad para pan que se tenían con la alquería. Los linderos de esta Alquería están perfectamente señalados en esta donación, y eran: de una parte el término de la Alquería de Alhadaini (hoy Zahardines); de la otra el término de Benacazón; de la otra el río Guadiamar y de la otra el olivar de la Villa de Sanlúcar. Los linderos de la heredad de pan eran: Alquería de Benazuza; de otro lado Esperón; por otra parte con el río y por la otra con Benimotrant. Además, dio unas casas con molino en el barrio de Aben Hamit y dos aranzadas de huerta delante de las casas que fueron de Aben Judit y de Ad da Hael; todo por la renta anual de 300 maravedíes alfonsíes.

Encomienda de la Orden de Santiago

Siendo Gobernador de la Orden de Santiago Don Pelayo Pérez de Correa, en el año de 1261 adquiere para la misma la Alquería de Benazuza, por permuta que hizo el día 11 de enero con Don Anaya López, por la cual se cedían Benazuza y sus tierras junto con las casas que tenía en Sanlúcar y un almacén en Sevilla a cambio de otras pertenencias que la Orden dio a Don Anaya.

En 1445 tuvo la administración de la Orden al Infante Don Enrique, a quien sucedieron Alonso de Luna, Beltrán de Cueva y el Infante don Alonso. De éste pasó el gobierno de la Orden a Juan de Pacheco, que renunció en su hijo Diego. Esta renuncia produjo una especie de cisma en la Orden, a la que pusieron fin los Reyes Católicos, al encargarse ellos mismos de su administración. Nombraron gobernador a Alonso de Cárdenas y, al morir éste, el maestrazgo fue incorporado a la corona, junto con sus tierras y dominios. A partir de esta fecha el título de Caballero de Santiago es puramente honorífico.

Al pasar los bienes de la Orden a la Corona, hubo necesidad de hacer unos inventarios y así, en el año 1502, el Comendador santiaguista Don Pedro de Cabrera dio una “relación de las heredades de casas e olivares e tierras de pan e viñas e tributos que hay en la Encomienda de Benazuza y Mures”. Según esta relación la Orden tenía junto con las casas, cortinales y huertas más de 360 aranzadas de olivar y 150 fanegas de sembradura en explotación directa por la Encomienda. Además se hallaban dadas a tributo de arrendamiento simple 130 aranzadas de viña entre 124 arrendatarios.

En al año 1538, el 11 de octubre, el Licenciado Don Fernando Antonio Yllescas, Alcalde Mayor de Mures, en nombre de S.M. Imperial Carlos I tomó posesión de la Casa de Benazuza con su Heredamiento de olivares, tierras y demás derechos y pertenencias junto con la jurisdicción civil y criminal. También tomó posesión de un pedazo de tierra nombrado la Vega da la Orden (de Santiago).

Mayorazgo de Benazuza

Francisco Duarte de Mendicoa

Artículo principal: Francisco Duarte de Mendicoa

Por una Real Cédula del Emperador, dada a principio del año 1539, se desmembró el lugar de Benazuza de la Encomienda de Mures, de la que hasta entonces había formado parte. Una vez libre Benazuza de la Encomienda de Mures, se puso en venta. Su valor fue calculado en 4.322.491 maravedíes.

El postor que adquirió Benazuza en la cantidad antes citada fue el Jurado Juan de Almansa y su mujer Constanza de Alcocer, quienes recibieron la Carta de Venta que les hizo S.M. escrita en pergamino de cuero y firmada de Real Nombre. El Jurado Juan de Almansa no compró Benazuza para sí, sino en nombre de su cuñado Francisco Duarte de Mendicoa, que era Factor de la Casa de Contratación de las Indias y Contador de Cuentas de S.M. en Italia y Proveedor y Comisario General de sus Armadas y Ejércitos.

Ante la imposibilidad por parte de Francisco Duarte, cuñado de Juan de Almansa, de comparecer personalmente en Sevilla para que le fuera transferida la compra de Benazuza, autoriza a su mujer, Catalina de Alcocer, para la compra de Benazuza. La Escritura de Poder está firmada en Bruselas, en el Señorío de Bravante, donde residía el Emperador y su Corte, el lunes, 9 de febrero de 1540. El jueves 5 de agosto de 1540, en las casas de Juan de Almansa se firmó la escritura de venta del Heredamiento de Benazuza en favor de Francisco Duarte y Catalina de Alcocer, documento que pasó ante Alonso de Barrera, escribano público.

Mayorazgo de los Duarte

El día 2 de agosto de 1545, mediante una Real Carta, S.M. concede licencia a Francisco Duarte y Catalina de Alcocer para que puedan hacer e instituir un Mayorazgo en favor de su hijo legítimo:

"…para que aquí en adelante los dichos bienes sean tenidos por bienes de Mayorazgo, inalienables e indivisibles, y para que por ninguna causa que sea se puedan vender ni donar, ni trocar ni enajenar por el dicho hijo ni por sus descendientes."



Con la licencia que les había otorgado S.M., fundan el Mayorazgo de los Duarte, con los siguientes bienes:

"Primeramente nuestro heredamiento, con sus casas y molinos y olivares y viñas y tierras de pan 1levar y cañamales, con sus censos y tributos y con todas sus pertenencias y jurisdicción, y derechos y usos y costumbres, que le dicen el Heredamiento de Benazuza que era encomienda de la Orden de Santiago. que yo, el dicho Francisco Duarte compré de S. M. el cual está en el Aljarafe de esta Ciudad de Sevilla, cerca de Sanlúcar la Mayor.

Así mismo de otro mi heredamiento de viñas que dicen el Argamasilla, que tenemos en el término de esta Ciudad de Sevil1a, al pago que dicen de San Nicolás, con sus casas y bodegas y lagares y con todas sus pertenencias.

De unas casas Principales con su Casa Fuerte y patio y salas altas y bajas y huertas y caballerizas y con todo lo que le pertenece, que nosotros tenemos en esta dicha Ciudad de Sevilla en la collación de San Nicolás con todos los materiales, y mármoles y piedras y maderas y otras cosas que en ella hay para labrar y edificar de nuevo, sin sacar ni quitar de ella cosa alguna.

El patronato y dominio de la Capilla Principal de la iglesia del monasterio de Nuestra Señora de la Victoria, que está en Triana, de la Orden de San Francisco de Paula.

La Huerta que tenemos en Triana junto a la Torre del Oro, que por una parte linda con el río Guadalquivir y a la cual pusimos por nombre Quitapesares, con sus casas y edificios y arboledas y con todo lo que le pertenece y con todas cuantas cosas de alquiler y magacines se labraren y fabricaren en ella, como yo lo pienso hacer y poner luego en obra, si Dios nos diere vida para ello.

Asimismo incorporamos en este dicho Mayorazgo todos y cualquier otros bienes y rentas que tenemos y los que durante los días de nuestra vida compremos o adquiramos por cualquier causa."



Villa de Benazuza

Artículo principal: Señorío de Benazuza

Al ser el Mayorazgo de Benazuza un pequeño enclave situado, prácticamente, dentro del término de Sanlúcar, se plantearon muchas discusiones jurisdiccionales. Para ponerles punto final, el propietario del Heredamiento compra la jurisdicción civil y criminal a S.M. el Rey Felipe II por 700 ducados (262.500 maravedíes), y por Real Carta de Venta fechadas en Valladolid el 20 de octubre de 1558, firmada por Su Alteza la Princesa Doña Juana, Gobernadora de Castilla en ausencia de S. M., se convierte el Heredamiento de Benazuza en Villa, teniendo su propietario todas las jurisdicciones.

Condado de Benazuza

Artículo principal: Condado de Benazuza

En la década de los años 1650, Don Gaspar de Teves y Tello de Guzmán contrae matrimonio con Doña Inés Fernández de Córdoba Duarte Cerón, que era la poseedora del Mayorazgo de Benazuza. Este Don Gaspar, que años antes había sido nombrado Marqués de la Fuente, era Caballero de la Orden de Santiago, Alcalde Mayor y Escribano Mayor de Sevilla, Acemilero Mayor de Felipe IV, Gentilhombre de S.M. y embajador sucesivamente en Francia, Alemania e Italia, y también gozaba de una Baronía en Portugal. En favor de la familia Duarte, S. M. Felipe IV, el 13 de diciembre de 1663 le concede a Don Gaspar el título de Conde de Benazuza.

Estando Don Gaspar de Embajador en Italia, casó a su hija primogénita y heredera, Doña Inés, con Don Gerónimo de Talentí, heredero del Marquesado de Conturbio.

Este Don Jerónimo de Talentí (primero de ese nombre) fue el 2º Conde de Benazuza como esposo de Doña Inés de Teves y Fernández de Córdoba Tello de Guzmán Duarte Cerón y Santa Gadea, y el que adquiere la posesión del Mayorazgo, que disfrutó desde Italia hasta su muerte en 1726.

El tercero, cuarto y quinto Conde de Benazuza llevan el mismo nombre.

El sexto Conde de Benazuza es Don Gerónimo Luis de Talentí, que tomó posesión del Mayorazgo el 8 de marzo de 1780. Era además Marqués de la Fuente y Señor de Lorena y de Padilla, en los reinos de España, y Marqués de Conturbio y Señor de Olenglio en el Estado de Milán.

Al morir el 4 de julio de 1796 sin dejar descendencia, su hermana la Excelentísima Señora Doña María Lelia de Talentí y Florencia, viuda de Castelli, el 15 de julio de 1796 tomó posesión del Mayorazgo de Benazuza, siendo la séptima Condesa.

El 29 de abril de 1815, por muerte de Doña Maria Lelia, tomó posesión del Mayorazgo su hija Doña María Luisa de Castelli y Talentí.

Extinción

El 27 de septiembre de 1820, por un decreto de las Cortes, quedan suprimidos todos los Mayorazgos facultando a los poseedores actuales de las vinculaciones suprimidas para que puedan disponer libremente como propios de la mitad de los bienes en que aquel los consistieren, y después de su muerte pasará 1a otra mitad al que debía suceder inmediatamente en el Mayorazgo. Este Decreto adquirió fuerza de Ley por otro Decreto de 30 de agosto de 1836.

Usando de 1os derechos que 1as leyes constitucionales le conceden, Maria Luisa de Castelli y Talentí vende el día 7 de mayo de 1840, a Don Joaquín de Amores, vecino de Umbrete, los bienes que se le adjudicaron como libres y que representaban la mitad de los del Mayorazgo. El precio que se pagó fue de 230 reales.

Como dicha Señora no tenía sucesor, se inició expediente en 1839 para nombrarle el sucesor, y por sentencia de 9 de junio de 1839 se nombró a Don Luis de Solís y Manso, Marqués de Rianzuela, por inmediato sucesor de dicho vínculo y Mayorazgo. Este Marqués de Rianzuela fue el que adquirió la otra mitad de los bienes del Mayorazgo, que el día 8 de febrero de 1850 vendió a Don Pedro Romero Barberí y Balmaseda.

Éste muere sin hijos y en su testamento nombra heredero a su sobrino Don Felipe de Pablo Romero, que es el que adquiere la propiedad de Benazuza.

La Villa de Benazuza desaparece como tal Villa por disposiciones de la Diputación Provincial de fecha 19 de abril de 1840, y el día 12 de mayo del mismo año pasa a incorporarse el término de la Villa de Benazuza al de Sanlúcar la Mayor y desaparece su Ayuntamiento.

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